Congreso nacional UJEV
San
Francisco 13 de Agosto del 2014 / 7:00 am
DEVOCIONAL
Por
José Escalona (IDAN)
Recupera lo perdido
Apocalipsis 2:1-7
Canto:
Hoy es tiempo de cambiar, y no mirar atrás, de reflejar tu amor al mundo. Ya no
puedo esperar, quiero alabar, mi vida hoy yo te la entrego.
Tengo un amigo que tiene una capacidad enorme
de memorizar, que con solo escuchar una canción dos o tres veces se la puede aprender. El no era cristiano y había un hombre que le dedicaba tiempo predicándole, pero él se resistía a recibir a Jesús.
Un día, este joven alardeando por su
capacidad de memorizar canciones recibió una gran lección de este hombre,
cuando le dijo:“De que vale aprenderte una
canción con letra cristiana si no la vives y la experimentas de corazón”.
Esas palabras retumbaron el corazón de este joven y llegaron a lo más profundo
de su ser, y el hoy testifica que esa frase fue la que Dios usó para quebrantar
su corazón.
Esta situación que vivió este joven
podría ser la situación actual de cualquier joven, y yo te digo “De qué nos vale
poder cantar una hermosa canción, venir a un hermoso evento como este, y no vivirlo y experimentarlo de corazón.
Y el mensaje de esta mañana es para
aquellos que de alguna u otra forma se han desanimado, han bajado su velocidad,
para aquellos que sienten que su vida no es la mejor, los que han fallado, para
aquellos que en algún momento de su vida perdieron ese algo especial que
experimentaron en sus primeros pasos en la vida Cristiana. Pero también para aquellos
que están acostumbrados una vida religiosa, organizada e intachable, pero que
carece de sabor, significado, amor y propósito.
Y el mensaje de hoy es “Recuperando lo perdido”. Podemos perder cosas especiales y estar
conscientes de eso, tener interés en recuperarlo, pero también carecer de
interés.
Pero también podemos
perder ese algo especial y no estar conscientes, y esto es sumamente peligroso. La Biblia habla de una Iglesia que lo tenía todo, pero que en el transcurrir
del tiempo perdió lo más valioso, y Dios tuvo que llamar su atención.
Esta Iglesia se encuentra
en el libro Apocalipsis capítulo dos, y
quiero destacar tres cosas importantes que debemos observar, reflexionar y
trasladarla a nuestra vida.
Apocalipsis
2:1-7
1Escribe al ángel de la iglesia de Éfeso:
Esto dice el que tiene las siete estrellas en su mano derecha y se pasea en
medio de los siete candelabros de oro: 2Conozco tus obras, tu duro
trabajo y tu perseverancia. Sé que no puedes soportar a los malvados, y que has
puesto a prueba a los que dicen ser apóstoles pero no lo son; y has descubierto
que son falsos. 3Has perseverado y sufrido por mi nombre, sin
desanimarte. 4Sin
embargo, tengo en tu contra que has abandonado tu primer amor.5¡Recuerda
de dónde has caído! Arrepiéntete y vuelve a practicar las obras que hacías al
principio. Si no te arrepientes, iré y quitaré de su lugar tu candelabro. 6Pero
tienes a tu favor que aborreces las prácticas de los nicolaítas, las cuales yo
también aborrezco. 7El que
tenga oídos, que oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que salga
vencedor le daré derecho a comer del árbol de la vida, que está en el paraíso
de Dios.
Amigos, la vida Cristiana es para
vivirla de corazón ya que en primer lugar
1. NO
ES CUESTIÓN DE RELIGIÓN, ES RELACIÓN.
Una vez un profesor
dijo: ¿Sabes cuál es el colmo de una Iglesia? "Que Cristo no esté en ella". Eso le
sucedió a la Iglesia Laodicea en apocalipsis 3:20 “Yo estoy a la puerta y
llamo, si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él y cenaré con él y él
conmigo”
¿Qué sucedió? Había dejado
a Jesús fuera de la Iglesia, fuera de sus vidas, y quizá decían “Somos la
Iglesia del Señor”
Pero hay algo
maravilloso acá y es que a pesar de todo aunque Cristo se encontraba afuera,
estaba tocando la puerta, estaba deseoso en restablecer su relación con ellos.
Aunque el Cristiano habla de vivir una relación con Dios y no
una religión, se corre el riesgo de vivir esa vida mecánicamente, por deber y/u
obligación, pero sin entusiasmo, pasión y productividad. Cuando eso sucede, ha
pasado de tener una relación a vivir una religión.
Esto estaba sucediendo con la Iglesia de Éfeso.
2Conozco
tus obras, tu duro trabajo y tu perseverancia. Sé que no puedes soportar a los
malvados, y que has puesto a prueba a
los que dicen ser apóstoles pero no lo son; y has descubierto que son falsos. 3Has perseverado y
sufrido por mi nombre, sin desanimarte.Apocalipsis
2:2-3
Esta Iglesia era alabada por su trabajo, paciencia y
sanidad doctrinal.
v.4 Sin embargo, tengo en tu contra que has abandonado tu
primer amor.
Mucha actividad en una iglesia no es sinónimo de
conservar el primer amor. Tampoco lo es el hecho de que luchen contra los
falsos apóstoles o profetas. Tampoco la perseverancia y el sufrimiento. Tú
puedes estar desenmascarando a los falsos maestros, puedes estar luchando sin
descanso por el nombre del Señor y aún así no haberte dado cuenta de que has
perdido el “primer amor”.
Esta frase “primer amor” debiera traducirse como “tu
prioridad en la vida”, y tu prioridad antes de ser la obra de Dios, es el Dios
de la obra.
Donde tus primeros pasos de la vida cristiana te
deleitabas en Dios, te relacionabas con Él, lo tenías presente en todo momento,
dependías de Él para cada ocasión.
El deseo de Dios para ti en esta mañana es que recuperes
lo que has perdido, que vivamos no una religión sino una relación constante y
creciente con Jesucristo.
Eso te
garantizará en segundo lugar vivir apasionadamente, ya que la vida Cristiana
2. NO
ES SIMPLEMENTE ACCIÓN, ES PASIÓN.
Cuando hablo de este
tema de pasión, recuerdo a una persona que le correspondía dar una de las
lecciones de un taller para líderes, su tema era la pasión, y yo lo animaba a que diera lo mejor de lo mejor, y al
terminar su participación, le pregunte a una persona que estaba de oyente, qué le
había parecido, y me dijo: “Bien José , pero le faltó pasión".
Una de las
características de la vida cristiana es la pasión para hacer las cosas, porque
ellas dan evidencia que tu relación con Dios es fuerte.
Cuando Dios le habló
a esta Iglesia acerca de perder su primer amor, dijo luego:
5A ¡Recuerda de
dónde has caído!
Era un llamado a
mirar hacia atrás y observar cómo se conducían antes, recordar cómo era su
vida en sus inicios, una vida conectada con Dios y con las personas, pero
también apasionada en lo que hacía, a tal punto que no les importaba anunciar
el evangelio a pesar de las persecuciones, las condiciones y el rechazo…
¿Qué hacías al principio?
Quizá mucho de lo que hacías, lo hacías por ignorancia, con mucho menos
conocimiento Bíblico quizá, mucho mas inexperto que ahora. Pero lo hacías con
verdadero amor,
las cosas del principio eran hechas con pasión por el Señor, quizá no
con tantos recursos, pero sí con todo el corazón.
Dios anhela de sus
hijos relación, Él desea relacionarse verdaderamente contigo, pero que
te apasiones por Él, por su obra y en todo lo que emprendas.
Ya que la vida Cristiana no es “Cuestión de religión sino de relación, que no es simplemente acción, sino también pasión, y en tercer y ultimo lugar no se trata de usar cosmético sino ser el reflejo de Dios.
Ya que la vida Cristiana no es “Cuestión de religión sino de relación, que no es simplemente acción, sino también pasión, y en tercer y ultimo lugar no se trata de usar cosmético sino ser el reflejo de Dios.
3. NO
ES USAR COSMÉTICO, ES SER El REFLEJO DE DIOS.
Debemos entender que la vida Cristiana no se trata de ti, se
trata de Él en tu vida. Así como la luna que no tiene luz propia, refleja la luz
del sol, así mismo debemos ser nosotros.
“Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la
excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros”.2 Corintios 4:7 RV60
Qué tu vida refleje
a Dios, que se parezca a Jesús, que huela al evangelio. Que las personas al
verte, vean el amor, misericordia y la justicia de Dios.
Pero se corre un riesgo de mostrar todo lo contrarío, y eso
fue una de las cosas que Jesús condenó en los fariseos e interpretes de la ley.
Mateo
23:23 RV60
23 ¡Ay
de ustedes, maestros de la ley y fariseos, hipócritas! Dan la décima parte de
sus especias: la menta, el anís y el comino. Pero han descuidado los asuntos
más importantes de la ley, tales como la justicia, la misericordia y la
fidelidad. Debían haber practicado esto sin descuidar aquello.
De que me vale pretender justicia y amar
poco.
De que me vale ganar al mundo y perder mi
alma
De que me vale ser religioso si no tengo una
relación con Dios.
De que me vale pretender mostrar que vivo si
en verdad no estoy viviendo.
Ghandi una vez dijo lo siguiente: Me gusta cristo, pero no me gustan sus
cristianos, porque no se parecen a Cristo.
Quizá muchos dirán
para justificar sus actos, no me vean a mí, miren a Cristo. ¿Sabes algo? si
decimos eso es porque posiblemente estamos mal con Dios, ya que nosotros somos el reflejo de
Dios en este mundo.
5B Arrepiéntete y
vuelve a practicar las obras que hacías al principio.
Entendiéndose que
arrepentirse es reconocer que es pecado anular mi relación con Dios. Arrepentirse es hacer un
giro de 180 grados en la vida y retomar aquellas cosas prioritarias que nos
caracterizaran siempre.
¿Cuál eran aquellas
obras del principio? Relación con Dios, vida apasionada y reflejar a Dios con
tu vida con misericordia, justicia y amor.
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Hace unos años sin
darme cuenta empecé a perder lo que para Dios era de gran valor y no
me había dado cuenta. Estaba entretenido aprendiendo doctrina, homilética,
hermenéutica y todas esas cosas que me ayudarían a ser un ministro preparado. Estaba predicando y me estaba aparentemente yendo bien.
En mis vacaciones
del instituto, llegué a mi casa muy cansado y decidí acostarme. En ese momento
mamá se percata de que por causa de la lluvia unas personas estaban frente al
apartamento. Y al abrir la puerta, se da cuenta de que era un viejo amigo con su
esposa, y por causa de la lluvia se habían quedado
allí.
Mamá los invita a pasar y me invita a saludarlos. Pero yo no quise salir porque estaba agotado y le dije: “Mamá no ves que estoy cansado” no quiero atender a nadie. Mamá asombrada por mi respuesta quedó en silencio y se fue.
Mamá los invita a pasar y me invita a saludarlos. Pero yo no quise salir porque estaba agotado y le dije: “Mamá no ves que estoy cansado” no quiero atender a nadie. Mamá asombrada por mi respuesta quedó en silencio y se fue.
¿Sabes algo? Ese
muchacho en ese tiempo estaba muy enfermo, con problemas en sus riñones yo
perdí una oportunidad de orar por él y hablarle de Cristo.
Yo, el predicador, el cristiano, el hijo de Dios no quiso atenderlo porque estaba cansado. Luego de que ellos se fueron, mamá entró al cuarto enojada y me dijo: ¿Dónde está tu Cristo? ¿De qué te sirve hacer tantas cosas si en las más importantes o mínimas no muestras a Dios?
Ahora te preguntó a
ti. ¿Dónde está Cristo? ¿Cerca de ti o lejos? Si está cerca me alegra eso, si
está lejos, te quiero motivar a vivir verdaderamente una vida en conexión con
Dios ¿Cómo está tu pasión por las cosas de Dios? Si no está muy fuerte, te
invito a que juntos le pidamos a Dios que avive esa llama en ti. ¿Qué estás reflejando? ¿Tu propia bondad o la
gloria de Dios? Seamos de aquellos deciden mostrar a Dios con su vida.
Hoy es tiempo de
cambiar, de no mirar atrás, de reflejar su amor al mundo.
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